Mi estilo, mi marca. Mi juego, mis cartas.
Estoy tan lejos tratando de olvidar.
No te miento: te extraño, y a pesar que transcurrió tanto tiempo aún guardo tu retrato.
No importa que hoy te alejes de mí, me extrañaras mañana.
El perdía en esa botella su rencor.
Ella con frialdad paseaba con otros por la ciudad.
Ella no tiene dueño, controlarla es más que difícil.