Son varios los príncipes postulados pero ninguno me promete amor sincero, he probado bocas como la manzana prohibida, sintiendo la culpa después de terminar sabiendo que mi corazón quizás olvide el dolor y aparezca un nuevo amor. Hoy son varios, pero me siento sola. Muchos pueden brindarme una hora de su vida, pero nada es seguro y es ahí cuando en un momento de soledad me doy cuenta que realmente estoy sola y me pierdo en el delirio, la ciudad gris se tiñe negra, llegada la noche mis ojos sufren de insomnio. Si es viernes olvidaremos con alcohol lo que pasó, pero entrado el domingo no tengo escapatoria.